Un equipo de cirujanos españoles y americanos ha empleado en el Hospital USP San Camilo de Madrid una técnica pionera que permite alcanzar importantes pérdidas de peso a través de una reducción de estómago sin necesidad de realizar ningún tipo de incisión quirúrgica, evitando, de este modo, las cicatrices.
El objetivo de esta técnica es el de reducir zonas de estómago (hasta un 20%) para disminuir la sensación de hambre y aumentar la de saciedad con un menor consumo de alimentos. Las cicatrices se evitan porque la cirugía se hace a través de la boca del paciente mediante una técnica endoscópica, empleando las herramientas adecuadas para crear múltiples pliegues del tejido del estómago y lograr así su reducción.
La técnica proporciona, al mismo tiempo, una considerable disminución del dolor, hospitalizaciones más breves que permiten al paciente volver a su rutina diaria en un plazo de entre dos y tres días, menor riesgo de infección y cicatrices no visibles en comparación con las cirugías tradicionales realizadas a través del abdomen.
Este tipo de intervención también está indicada en los pacientes que comienzan a ganar peso debido a que su estómago se ha dilatado desde la anterior cirugía bariátrica.
Al tratarse de un procedimiento nuevo, algunos efectos secundarios a largo plazo resultan todavía desconocidos. No obstante, hasta el momento no se han detectado grandes complicaciones, por lo que se trata de un método recomendable gracias a los beneficios que aporta.