El pasado 1 de junio entraron en vigor las nuevas tarifas eléctricas implantadas por el Gobierno de España, que distinguen entre tres periodos de energía diario: las horas punta, las más caras, engloban dos franjas horarias, de 10.00 a 14.00 horas y de 18.00 a 22.00 horas; las horas llanas, con un coste intermedio, se fijan entre las 8.00 y las 10.00 de la mañana, las 14.00 y las 18.00 de la tarde y las 22.00 y las 00.00 de la noche. El periodo de energía valle, el más barato, por último, abarcaría la madrugada de los días entre semana (de 00.00 a 8.00 horas), fines de semana y festivos.
Precisamente, el hecho de que el horario de tarificación eléctrica más barato coincida con la madrugada de los días laborables ha llevado al Grupo de Trabajo de Cronobiología de la Sociedad Española de Sueño (SES) a denunciar que estas nuevas tarifas pueden tener "efectos nocivos" sobre los ritmos circadianos y los hábitos de sueño de los ciudadanos.
"El hecho de que el tramo de menor precio sea el comprendido entre las 00:00 y las 08:00 de la mañana ha llevado a parte de la población a plantearse realizar distintas tareas domésticas como poner lavadoras o planchar en este horario, que debería estar dedicado al sueño y al descanso", afirma la doctora María Ángeles Bonmatí Carrión, miembro del Grupo de Trabajo de Cronobiología de la SES.
Según la experta, el hecho de realizar tareas domésticas por la madrugada conllevará no solo una reducción en la duración del sueño, sino también una mayor exposición a la luz artificial nocturna, "considerada altamente disruptiva para nuestros ritmos circadianos y nuestro sueño y que, de hecho, deberíamos procurar evitar". Además, añade que esta postergación de las labores domésticas al horario de madrugada podría derivar también "en la generación de ruido en horario nocturno, con la consiguiente perturbación del sueño de vecinos de viviendas colindantes".
Desde este Grupo de Trabajo se añade que, además, estas tarifas afectarán principalmente a aquellas personas o familias con rentas bajas, ya per se en situación de vulnerabilidad: "Por un lado, se van a ver obligadas a acogerse a la utilización de la electricidad en ese tramo horario. Por otro, habitan viviendas que carecen de los medios de aislamiento del ruido ocasionado por el vecindario o por sus propios electrodomésticos".
Unas tarifas que podrían incrementar la predisposición española a la "vespertinidad"
Diversas investigaciones científicas han demostrado que la sociedad española, debido a distintas características culturales y a su horario oficial, presenta cierta predisposición a la vespertinidad, es decir, a alargar los días más allá de lo deseable desde un punto de vista de salud. Para la Dra. Bonmatí, estas nuevas tarifas eléctricas "podrían acentuar esta tendencia y contribuir, por tanto, a una reducción en la duración del sueño nocturno, lo que se ha relacionado con la aparición y el agravamiento de distintas patologías, tanto físicas como relativas a la salud mental".
En ese sentido, la Sociedad Española del Sueño quiere mostrar una opinión "crítica" con los tramos horarios estipulados con las nuevas tarifas eléctricas y piden a las instituciones que velen para que las medidas adoptadas en cualquier ámbito contribuyan a mantener o mejorar la calidad de vida de la ciudadanía. "Entendemos que existen alternativas, como la expansión de la tarifa valle al periodo comprendido entre las 22.00 y las 10:00 horas, que podrían aunar la necesidad de reducir las grandes oscilaciones en el consumo de energía y, a la vez, evitar un empeoramiento del bienestar y de la salud de los ciudadanos".