Según los últimos datos publicados en la Encuesta Nacional de Salud, hoy en día el 24% de los españoles afirman fumar a diario. La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera el tabaquismo como una enfermedad y una de las principales formas de drogadicción y causa de mortalidad, invalidez y muerte prematura que se puede evitar.
El fumador debe ser consciente de que el tabaquismo es una enfermedad. Por ello, requiere la intervención de profesionales sanitarios. Según los expertos, el apoyo de los profesionales farmacéuticos es esencial para ayudar al fumador a identificar y poner en práctica el tratamiento necesario que le ayude a conseguir dejar el hábito de fumar.
La motivación, la ayuda y el consejo del profesional farmacéutico son fundamentales para ayudar al paciente en el proceso de cesación tabáquica. Además, el farmacéutico puede complementar su intervención informando de cuáles son los tratamientos farmacológicos más indicados para ello.
Partiendo de estas premisas, Alliance Healthcare, en colaboración con la compañía biomédica Pfizer, ha organizado un curso de formación con el objetivo de ofrecer al profesional farmacéutico herramientas que le sirvan de apoyo para aconsejar a los pacientes sobre cómo dejar de fumar y saber de qué manera pueden hacer un seguimiento óptimo de aquellas personas que abandonan el tabaco.