Dejar de fumar es una de las decisiones más importantes que se pueden adoptar para mejorar la salud y ganar calidad de vida. También es una buena opción para respetar el derecho a la salud de quienes nos rodean.
Para poder dejar de fumar ha de saber dos cosas sobre su relación con el cigarrillo, que le ayudarán a avanzar en el proceso de dejar de fumar:
- ¿Qué le proporciona el tabaco para continuar fumando a pesar de querer dejarlo?
- ¿Por qué razones quiere dejar de fumar; qué cree que ganará si lo consigue?
Razones por las que continúa fumando
- El tabaco le ayuda a despejarse, a mantener un nivel elevado de atención, le estimula, incrementa su energía y, en general, le ayuda a seguir adelante.
- No siempre es fácil distinguir si fuma para sentirse bien, para obtener placer, o bien para evitar sentirse mal. Si lo que busca es placer, encontrará placeres alternativos mayores y mejores.
- Con frecuencia, cree que el cigarrillo le ayuda a superar los momentos difíciles, el estrés y los problemas diarios.
- Ya sabe que tiene una fuerte adicción. Precisamente, porque le resulta tan difícil prescindir del cigarrillo, cuando lo consiga, podrá darse cuenta de que, en realidad, usted puede más que el tabaco. Ahí es cuando valorará enormemente su logro y sentirá que no vale la pena volver a la situación de dependencia anterior.
- Ya no disfruta de la mayoría de cigarrillos que fuma y lo hace por automatismo. Lo que ha de hacer ahora es romper las asociaciones inconscientes que ha establecido entre el acto de fumar y sus hábitos cotidianos.
Valore las ventajas de dejar de fumar
Le interesará saber las ventajas más frecuentes, señaladas por la mayoría de las personas que ya han dejado de fumar. Son las que se desarrollan a continuación.
Por motivos de salud
- Para respirar mejor.
- Para cansarse menos y dejar de toser.
- Para vivir más años y vivirlos mejor.
- Para reducir las posibilidades de sufrir un ataque al corazón, una embolia o algún tipo de cáncer.
- Para respetar el derecho a la salud de las personas con las que convive, especialmente los niños, los ancianos o las personas con problemas de salud.
En mujeres embarazadas
- Para aumentar la posibilidad de tener un bebé saludable.
- Para disminuir las complicaciones durante el embarazo y el parto.
- Para evitar graves riesgos de salud al futuro/a hijo/a.
Para mejorar la calidad de vida
- Para recuperar el buen aliento y no ahuyentar a nadie de su lado.
- Para que la ropa no apeste a tabaco.
- Para disfrutar en la casa de un ambiente más fresco y limpio.
- Para que los besos no sepan a cenicero añejo.
- Para no quemar más camisas, pantalones y jerséis.
- Para recuperar una dentadura blanca y limpia.
- Para gastar el dinero en cosas más gratificantes: música, perfumes, libros, cine, teatro, juegos, viajes, vacaciones, etc.
- Para no tener que pintar la casa cada año.
- Para ahorrar en tintorería.
Por autoestima y preocupación por los suyos
- Para librarse de esta horrible esclavitud.
- Porque usted vale demasiado como para dejarse machacar por el tabaco.
- Para evitar el envejecimiento prematuro de la piel.
- Para que el rostro recupere el aspecto de la edad que realmente tiene.
- Para dar una alegría a su pareja (y porque así dejará de agobiarle con el tema...).
- Para ser un buen ejemplo para sus hijos.
Aparte de escuchar a quienes ya han dejado de fumar, también debe saber lo que revelan los miles de estudios epidemiológicos realizados a lo largo de los últimos 50 años. Sus resultados están ya fuera de toda duda: a medida que pasa el tiempo, aumentarán los beneficios de dejar de fumar para su salud.
