La clave para combatir la obesidad es una estrategia que resulte fácil de seguir

Acordar con el interesado una hoja de ruta que se adapte a él, y por lo tanto le parezca más sencilla, mejora los resultados

"Combatir la obesidad requiere establecer una estrategia global, personalizada y realista, partiendo de la situación de cada persona. Se incorporan recomendaciones de acuerdo a cada caso con objetivos a corto, medio y largo plazo desde todos los puntos de vista relevantes (alimentación, gestión del estrés, ejercicio físico, etc.) y, en casos seleccionados, medicación y/o procedimientos intervencionistas (cirugía o endoscopia). Todo ello, con el objetivo final de alcanzar, en un plazo adecuado, un estilo de vida y un peso saludables que consoliden los resultados obtenidos", explica el especialista en Medicina Interna de la Unidad de Chequeos de la Clínica Universidad de Navarra (CUN), el Dr. Manuel Landecho Acha. Además, el Dr. Landecho indica que "el tratamiento contra la obesidad depende, en gran medida, de las condiciones y la vida de cada persona y, por ello, acordar con el interesado una estrategia que se adapte a él, y por lo tanto le parezca sencilla, mejora los resultados". Estas, precisamente, son las bases de las recomendaciones personalizadas.

La obesidad, que según el informe Anual del Sistema de Salud de 2017 padecen el 46,6% de los vascos, consiste en una acumulación anormal o excesiva de grasa que puede ser perjudicial para la salud. Ante esta "epidemia", el Dr. Landecho Acha y el Dr. Víctor Valentí Azcárate, especialista en Cirugía General y Digestiva del Área de Obesidad de la CUN, explorarán las diversas formas de prevenir o tratar esta enfermedad hoy lunes, 10 de junio de 2019, a partir de las 19.00 horas en el marco de la jornada divulgativa Encuentros con la Salud. La ponencia, que lleva por título Tratamiento contra la obesidad: recupera la calidad de vida, tendrá lugar en el Artium de Vitoria, será gratuita y estará abierta al público general hasta completar el aforo.

Tratamiento a medida

"El punto fuerte de la nutrición personalizada frente a los tratamientos convencionales es que está diseñada a medida para cada paciente. Analizamos lo que está comiendo en su día a día, el deporte que hace y el trabajo que desempeña y, en base a todo ello, diseñamos una hoja de ruta individualizada que le permita alcanzar los objetivos deseados", explica el Dr. Landecho. El paciente abandona la consulta con una serie de recomendaciones y modificaciones a nivel nutricional, deportivo, de gestión del estrés y de mejoría de la calidad de sueño que debe implementar en su rutina y, periódicamente, se comprueba la evolución para potenciar los cambios que han reportado mayor beneficio, y rediseñar aquellos que no están funcionando adecuadamente. Tras ello, se llevan a cabo nuevas adaptaciones que mejoran el sistema y el proceso comienza de nuevo.

Sobre este procedimiento, el experto indica que "es un planteamiento global que va más allá de la dieta e incorpora y analiza otros factores como el ejercicio, la gestión del estrés, etc., ya que el origen de la enfermedad puede residir en que la persona duerme poco o pasa tantas horas sin ingerir alimentos que cuando llega la hora de comer comete excesos". Además, añade que "el factor principal para tener éxito a la hora de perder peso es la reeducación. Lograr cambiar los hábitos del paciente sin que se perciba como un castigo y conseguir que el usuario esté satisfecho con los resultados que ha conseguido para que, de esta manera, observe que merece la pena continuar con los nuevos hábitos que ha adquirido".

En los casos en los que se precisa una operación, existen técnicas quirúrgicas y otras técnicas no quirúrgicas, como las endoscópicas "que pueden ser la banda gástrica ajustable, gastrectomía tubular o el  bypass gástrico, entre otros. La elección de la técnica depende de la situación del paciente. En menos de 48 horas realizamos la valoración completa de él por todos los especialistas según nuestro protocolo de obesidad. El objetivo es alcanzar el peso corporal adecuado y pactado con cada paciente de manera gradual y mantenida".

El problema del IMC

El Índice de Masa Corporal (IMC) es un número que se calcula en base al peso y la estatura de la persona, y suele utilizarse para determinar si se padece obesidad o no. "El hecho de que para clasificar la obesidad se utilice el IMC genera un problema. El índice de Arnold Schwarzenegger en Terminator indicaría un grave problema de obesidad y, sin embargo, no le sobraba ni un gramo de grasa. Dependiendo de cada caso, el mismo valor puede estar hablando de alguien con mucho músculo o con una obesidad mórbida".

Juventud y prevención

La obesidad es una enfermedad que empeora la calidad vida y aumenta la mortalidad (diabetes, hipertensión, etc.). De hecho, los últimos estudios han indicado que puede favorecer la aparición de algunos tipos de cáncer y dificultar su tratamiento. A este respecto, Landecho expone que "la inclusión de hábitos saludables desde la juventud es la mejor opción para prevenir los problemas derivados de la obesidad en el futuro. Al ponerlos en práctica desde pequeños es mucho más fácil que se mantengan a lo largo de la vida".

Esas prácticas que deberían fomentarse entre los más jóvenes son las habituales: comer bien, practicar un ejercicio físico adecuado, tener una buena gestión del estrés y las preocupaciones, una buena calidad del sueño ("hábito fundamental") y evitar el consumo de tóxicos como el tabaco o el alcohol.

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