La Comisión propone una mejor protección de los trabajadores contra las sustancias cancerígenas

El cáncer es la primera causa de mortalidad laboral en la UE, con un 53 % del total, por lo que es el mayor riesgo individual para la salud de los trabajadores en la Unión Europea.

Para mejorar la protección de los trabajadores contra los carcinógenos químicos, la Comisión propone hoy modificar la Directiva 2004/37/CE sobre carcinógenos y mutágenos, limitando la exposición a trece carcinógenos en el lugar de trabajo.

Marianne Thyssen, Comisaria de Empleo, Asuntos Sociales, Capacidades y Movilidad Laboral, ha declarado: "El cáncer tiene repercusiones devastadoras en los trabajadores, las familias, la industria y la sociedad. Con la presente propuesta se salvarán cien mil vidas en los próximos cincuenta años. La protección de los trabajadores es el núcleo del compromiso de la Comisión con una Europa social fuerte".

Concretamente, la Comisión propone abordar la exposición a trece carcinógenos introduciendo nuevos valores límite o modificando los existentes en la Directiva sobre agentes carcinógenos y mutágenos. Estos valores límite consisten en establecer una concentración máxima de una sustancia cancerígena en el aire del lugar de trabajo. La propuesta se basa en datos científicos y se formula tras amplios debates con científicos, empresarios, trabajadores, representantes de los Estados miembros e inspectores de trabajo.

Un ejemplo concreto de una sustancia que va a añadirse es la sílice cristalina respirable, que la Comisión propone incluir en la Directiva como sustancia "generada en un proceso", lo que quiere decir el polvo que se produce en procesos laborales como la minería, la explotación de canteras, la perforación de túneles o al cortar, aplastar o pulverizar materiales que contienen sílice, como hormigón, ladrillos o rocas. Algunas empresas controlan bien las concentraciones de esta sustancia en el aire, con el respaldo de un acuerdo específico entre los interlocutores sociales, pese a lo cual es una de las principales causas de silicosis y de cáncer de pulmón profesional. La propuesta de la Comisión protegerá a los trabajadores en toda la UE, también del sector de la construcción, en el que se concentra casi el 70 % de los trabajadores expuestos al polvo respirable de sílice cristalina.

Gracias a estos valores límite se producirán menos casos de cáncer profesional. Además, unos valores límite de la UE promueven la coherencia creando unas condiciones equitativas entre todos los usuarios y un objetivo común para los empresarios, los trabajadores y las autoridades. Por ello, la propuesta generará un sistema más eficiente de protección de la salud de los trabajadores y mejorará la equidad en el mercado único.

Antecedentes

Según la Organización Mundial de la Salud, el cáncer es la segunda causa de muerte más importante en la mayoría de los países desarrollados. En la Unión Europea es la primera causa de mortalidad laboral. Cada año, se atribuye al cáncer el 53 % de las muertes laborales, frente al 28 % debido a enfermedades cardiovasculares y el 6 % a enfermedades respiratorias.

La exposición laboral a algunas sustancias puede causar cáncer. El cáncer es una enfermedad compleja, algunos de cuyos factores causales son difíciles de determinar, pero está claro que los cánceres profesionales pueden prevenirse reduciendo o eliminando exposiciones que lo producen.

Para proteger a los trabajadores frente a tales riesgos, la UE adoptó la Directiva 2004/37/CE sobre carcinógenos y mutágenos, que indica las medidas que deben adoptarse para eliminar o limitar la exposición a sustancias cancerígenas, contribuyendo así a evitar cánceres profesionales y las enfermedades que conllevan.

Con el fin de establecer, en el marco de la Directiva, valores límite para diversos carcinógenos, la Comisión inició una evaluación científica y económica de más de veinte sustancias prioritarias. En la UE, unos veinte millones de trabajadores están expuestos por lo menos a una de estas sustancias.

La presente propuesta aspira a introducir valores límite para trece de las sustancias declaradas prioritarias. Para las demás sustancias queda trabajo preparatorio por hacer, por lo que para ellas se formulará una nueva propuesta a finales de 2016.

Algunos de estos trece carcinógenos, como la sílice cristalina respirable, los compuestos de cromo VI, los serrines de maderas duras o la hidracina, afectan a un gran número de trabajadores. Otros parecen utilizarse menos, pero estas sustancias se consideran prioritarias por la alta correlación entre el número de trabajadores expuestos a ellas y los casos de cáncer.

Noticias relacionadas

> Ver todas
Proliferación anormal y descontrolada de células malignas en un tejido con invasión local y a distancia de otros tejidos.

Ver