Según indican los especialistas de la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración (SEPA), una mala salud bucodental puede condicionar el desarrollo de enfermedades como determinadas alteraciones cardiovasculares y pulmonares, la diabetes y provocar partos prematuros.
Recientemente, las revistas American Journal of Cardiology y Journal of Periodontology han publicado un documento de consenso sobre la relación entre las enfermedades cardiacas y las de las encías, en el que se recomienda a cardiólogos y odontólogos examinar tanto la boca del paciente como su historia cardiovascular. Por su parte, la Academia Americana de Odontología ha establecido nuevas directrices que exigen asesoramiento sobre salud oral a las mujeres embarazadas.
Según el Dr. David Herrera y el Dr. Pedro Diz, especialistas de la SEPA, estas asociaciones se producen fundamentalmente por el paso de las bacterias que causan la periodontitis desde la cavidad oral a la sangre (bacteriemia) y, por tanto, al resto del cuerpo. Un fenómeno que viene condicionado por el grado de higiene oral, fundamentalmente por la acumulación de placa bacteriana y el nivel de gingivitis. Además, las bacteriemias también se han relacionado recientemente con el desarrollo de la arteriosclerosis.
Los expertos destacan, por tanto, la necesidad de prevenir y tratar las enfermedades periodontales ya que su efecto no solo se limita a la salud bucal, sino también a nivel sistémico.
El Dr. Antonio Santos afirma que "mantener un nivel de higiene óptimo es primordial e incluso más importante que la administración preventiva de antibióticos para reducir el riesgo de enfermedades provocadas por las bacteriemias". Cepillarse los dientes, el uso del hilo de seda o de cepillos interdentales y de colutorios antimicrobianos científicamente probados puede ayudar a prevenir complicaciones de este tipo.