La Cátedra Animales y Sociedad de la Universidad Rey Juan Carlos (URJC) ha celebrado las I Jornadas de Prevención del Suicidio en la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid bajo el lema "hablemos del suicidio, acabemos con el tabú", con el objetivo de visibilizar la situación del suicidio en España, que arroja cifras alarmantes como las 70.000 tentativas que se producen en el país, de las cuales más de 20.000 tienen consecuencias graves. De esta forma, profesionales del ámbito de la salud, la seguridad o la comunicación se han focalizado en prevenir, educar y sensibilizar sobre este problema de salud pública que se sitúa como la primera causa de muerte no natural y la segunda causa de muerte entre los jóvenes de entre 14 y 29 años.
Así, Natalia de Andrés, alcaldesa de Alcorcón, Carmen Gallardo, decana de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Rey Juan Carlos y el rector, Javier Ramos, fueron los encargados de inaugurar estas Jornadas con el fin de mostrar públicamente su posicionamiento frente al suicidio, resaltando que este problema de salud mental es una responsabilidad de toda la sociedad y un debate que debe tratarse desde el rigor de la investigación universitaria, siendo prioritario, desde el ámbito autonómico, que se diseñen y desarrollen campañas de apoyo adaptadas a la realidad de cada municipio.
La primera ponencia corrió de la mano de Andoni Anseán, presidente de la Fundación Española para la Prevención del Suicidio, que durante su exposición "Estrategias de prevención del suicidio" comenzó declarando que casi 4.000 personas mueren al año en España por este motivo, por lo que es fundamental contar con un plan estatal de prevención de la conducta suicida, una circunstancia que "implica a toda la sociedad, a todas las instituciones y a todos los servicios públicos y privados".
Además, el profesional aseguró que la conducta suicida se puede llegar a evitar trabajando sobre tres niveles de alerta: la universal, destinada a la población general, la selectiva, enfocada en grupos de riesgo, y la indicada, focalizada en personas que han presentado una conducta suicida previa. Para ello, "se deben desplegar políticas de seguridad y estabilidad laboral, económica y de vivienda, elaborar planes y desarrollar políticas preventivas, introducir la educación emocional en los centros de enseñanza, promover el correcto abordaje informativo de la conducta suicida en los medios de comunicación, supervisar contenidos suicidas en redes sociales y controlar el odio y el acoso que se vierte a través de ellas… en definitiva, promover sociedades sanas, seguras, solidarias e informadas ante el riesgo suicida".
En cuanto a los factores de riesgo que caracterizan a cada colectivo, Anseán explicó que "se deberán llevar a cabo acciones como evaluar y derivar a tiempo a alumnos que puedan presentar este riesgo, así como a las personas mayores en los servicios sociales y a los menores en situación de vulnerabilidad social, extender los cuidados paliativos, disponer de medidas de prevención estructural y funcional en centros penitenciarios o incorporar la prevención de riesgos suicidas dentro de las políticas de prevención de riesgos laborales". Por último, afirmó que el principal reto que tenemos en la actualidad "no se trata de prevenir el suicidio, sino de promover la vida".
Posteriormente, Mercedes Cavanillas, psicóloga sanitaria y psicóloga de emergencias, asesora y docente en la Unidad formativa de Intervención en Tentativas de Suicidio (ITS) de Bomberos del Ayuntamiento de Madrid, desmontó a través de su ponencia "hablemos del suicidio: creencias, realidades y apoyos", algunos mitos sobre el suicidio, explicando que "aunque hay estudios que dicen que hay prevalencia de un 90% de patología mental en suicidas, no existe una única causa, desconociéndose si va antes la causa o lo diagnosticable". Por su parte, Santiago Martínez, bombero especialista y coordinador de la unidad de intervención en tentativas de suicidio (ITS) del Ayuntamiento de Madrid aportó claves sobre como tratar la intervención en tentativa de suicidio y cómo interpretar las diferentes señales en un suceso, al existir una tendencia ascendente de suicidios en Madrid que ha conllevado que el número de intervenciones en la ciudad se incremente exponencialmente. Por ello, Martínez hizo hincapié en algunos factores, como la escucha activa y compasiva o la empatía, que se deben trabajar durante esta intervención.
Por otro lado, el periodista Guillermo Córdoba, especializado en el tratamiento del suicidio en los medios de comunicación, expuso la importancia de situar a los medios de comunicación como herramienta preventiva de este problema, ya que éste continúa siendo un tema tabú y un estigma en la sociedad. Por ello, resaltó el rol fundamental de la prensa en "educar a través de la superación, aportando información sobre los factores de riesgo, incluyendo recursos de ayuda en cada pieza como llamada a la acción y contando con especialistas que aporten su testimonio sobre este tema con rigor y calidad".
Asimismo, el evento contó con la participación de Juan Enrique Soto, doctor en Psicología por la UCJC de Madrid, Inspector Jefe del Departamento de Humanidades y RRHH del Centro de Altos Estudios Policiales de la Policía Nacional y creador de la Sección de Análisis de Conducta en Policía Nacional de 2010 a 2020, con su ponencia sobre los "conceptos básicos de la autopsia psicológica", que es una técnica indirecta que analiza el estado mental de una víctima para dilucidar si su muerte tuvo una etiología natural, accidental, homicida o suicida, de manera que estudiando cada caso nos ayude a prevenir o evitar suicidios futuros. Seguidamente, Katya Vázquez, psicóloga sanitaria experta en psicología positiva e ingeniera emocional y fundadora de la Asociación CITA Terapias y Animales, impartió una conferencia sobre los "factores que potencian la resiliencia y la fortaleza psicológica en población infantil- juvenil". Por último, Benito José Florido, comandante de la Guardia Civil E.F.S. y psicólogo, trató el "programa de Prevención de Conductas Suicidas en el marco de la Guardia Civil".
Cabe recalcar que el programa de las jornadas incluyó un taller práctico para profesionales del mundo de la comunicación, otro para detectar el riesgo, sobre cómo intervenir en una crisis suicida y, por último, un taller de intervención asistida con perros. "En este último caso, hablamos de la principal línea de actuación de la Cátedra: las Intervenciones Asistidas con Animales (IAA). De esta forma, se trabajó una dinámica grupal para fomentar la inteligencia emocional a través de los mismos, ya que éstos sirven como un vehículo para fomentar los lazos afectivos, la escucha empática y el apoyo emocional de las personas, logrando la mejoría de sus funciones físicas, psicosociales, cognitivas y emocionales", detalla Nuria Máximo, directora de la Cátedra Animales y Sociedad.