En los últimos años se ha triplicado la venta de medicamentos por Internet, hasta el punto que según datos de la Agencia Española del Medicamento, alertan de que en 2016, se retiraron más de 800 anuncios de medicamentos ilegales. De todos ellos, la mayor parte corresponden a fármacos relacionados con la pérdida de peso, la impotencia sexual y los anabolizantes.
Según explica la doctora Marisa Navarro, psicoterapeuta y autora de los libros "La medicina emocional" y "El efecto tarta", el auge de la demanda de estos fármacos en la red, es un problema global que se debe principalmente a la solución fácil, rápida y confidencial que prometen a personas, en muchos casos desesperadas, que tienen serios problemas de falta de autoestima, y que son incapaces de acudir a un médico o especialista a pedir ayuda por múltiples razones.
"Suelen ser individuos que normalmente están muy insatisfechos con sus vidas y sobre todo con su físico, hasta el punto de creer que su falta de oportunidades, su estado de ánimo e incluso todo lo negativo que consideran que pasa en su vida, etc, se debe a las características de su cuerpo. Así mismo se sienten muy atraídos por el físico de otras personas a las que llegan a idealizar" afirma la doctora.
Por este motivo, las pastillas para adelgazar o conseguir musculatura están entre las más demandadas, entre hombres y mujeres de todas las edades. "Cada vez nos encontramos en consulta con personas más jóvenes e incluso adolescentes, que nos indican que están consumiendo algún tipo de medicamento que han adquirido en la red, sin ni siquiera consultarlo con sus padres" comenta.
"Estos llegan a obsesionarse de tal manera que recurren a Internet y pierden cualquier atisbo de sentido común" añade. No tienen en cuenta los peligros que estos fármacos pueden suponer para su salud y toman pastillas que les llegan a sus domicilios, que no han tenido control alguno y se presentan sin etiquetas, ni prospecto, etc. Y en las que se ha demostrado, en muchos casos, que contienen ingredientes peligrosos, calificados como sustancias incluso prohibidas por las autoridades sanitarias.
"En la mejor de las situaciones puede que estos fármacos no tengan efectos, y nos encontraríamos ante una estafa, pero en el peor, pueden llegar a ocasionar, por ejemplo si hablamos de los anabolizantes, problemas que van desde la calvicie y el acné, hasta disfunción eréctil, afecciones hepáticas y hasta el desarrollo de cáncer de hígado. En el caso de las pastillas para adelgazar, lo más frecuente es que su consumo llegue a afectar al tiroides" advierte Marisa Navarro.
La doctora recuerda que cualquier medicamento siempre debe estar prescrito por un especialista y que cualquier cambio que se quiera dar en nuestra vida, como puede ser un cuerpo más sano o ejercitado, requiere un esfuerzo. "Hoy en día no pensamos que los resultados llegarán a largo plazo, todo lo queremos a corto plazo y sin hacer ningún tipo de sacrificio, y aunque Internet supone una solución rápida para muchas cosas, todavía el milagro para conseguir este tipo de objetivos no ha llegado" afirma.
Por ello, la principal solución para acabar con este problema es la concienciación de los peligros que supone adquirir cualquier tipo de sustancia de estas características, y que se eduque en la necesidad de desarrollar la autoestima de las personas. Aprender a cuidarse y a quererse como uno es, y a ser conscientes de que se puede llegar a conseguir nuestros objetivos si se es constante, siempre que estos sean realistas.
"Por último también recuerdo que tanto médicos como farmacéuticos, estamos siempre para ayudar, y nunca se debe tener vergüenza de solicitar el consejo de un experto" finaliza.