Las personas mayores de 65 años es uno de los colectivos más vulnerables ante la llegada del calor. Las altas temperaturas, la humedad y la falta de viento les afecta especialmente. Por ello, ante la inminente llegada del verano, que ya se ha dejado sentir en los últimos días, es importante conocer qué medidas se deben tomar para prevenir y evitar los efectos de la ola de calor.
Desde Servicios de Teleasistencia, ya se ha puesto en marcha el protocolo de información y seguimiento especializado ante la llegada de las altas temperaturas. Cerca de 130.000 usuarios de toda España se beneficiarán de recomendaciones y consejos dirigidos a prevenir los efectos derivados de la ola de calor, con especial prioridad en aquellos de mayor edad y los que padecen enfermedades cardiovasculares y/o respiratorias.
A través de las habituales llamadas de seguimiento que se realizan a los usuarios, Servicios de Teleasistencia les informa de la llegada de las altas temperaturas y las recomendaciones para evitar sus posibles efectos:
- Refrescarse cada vez que se sienta calor e hidratarse sin esperar a tener sed, evitando líquidos excesivamente fríos o azucarados
- Evitar hacer esfuerzos en las horas de calor
- Mantener las medicinas en un lugar fresco
- Utilizar ropa clara, ligera, fina, no apretada y que cubra la mayor parte del cuerpo posible
- Evitar salir a las horas centrales del día y siempre protegidos del sol
- Permanecer el mayor tiempo posible a la sombra, en lugares frescos y/o climatizados
- Si no tiene aire acondicionado, intente conseguir un ventilador y en casa mantenga las ventanas cerradas y las persianas echadas durante el día y abrirlas sólo por la noche y a primera hora de la mañana
- Comer pequeñas cantidades de comida con frecuencia, y preferiblemente frutas y verduras, evitando las ricas en proteínas
- Evitar que las personas mayores viajen en automóvil o vehículos sin aire acondicionado o permanezcan en el interior
- Pulsar el botón rojo de Servicios de Teleasistencia cuando se detecte los síntomas asociados a un golpe de calor, como náuseas, mareos y problemas intestinales