Los especialistas en cirugía plástica recuerdan que el otoño y el invierno son las épocas más adecuadas para someterse a una operación de cirugía plástica. Cirujanos como el doctor Vila Moriente, secretario de la Sociedad Gallega de Cirugía Plástica, recomiendan a los pacientes interesados en retocar su cuerpo que realicen la operación en estos meses de frío: "Enero y febrero son meses muy aconsejables para estas intervenciones por varias razones", afirma. El doctor Vila Moriente expone algunos de los motivos:
- Menor exposición solar: No se puede tomar el sol tras una intervención de cirugía plástica ya que éste puede provocar la pigmentación de cicatrices y hematomas, lo que dificulta de cicatrización. En invierno vamos más tapados y la incidencia de los rayos solares es menor, además de tener menos días de sol, por lo que la recuperación de la zona del cuerpo tratada es más fácil y rápida. En el caso de intervenciones en la cara (lifting, rinoplastia, blefaroplastia), donde es inevitable recibir la acción del sol, debemos usar una protección adecuada con cremas y prendas.
- Las bajas temperaturas contribuyen a mejorar la inflamación que suele aparecer tras algunas intervenciones.
- Es más fácil ocultar las cicatrices porque llevamos una mayor cantidad de ropa, por lo que las personas de alrededor no tendrán por qué saber que nos hemos realizado un retoque.
- Algunas intervenciones requieren del uso de fajas postoperatorias durante unas semanas. Dichas fajas resultan muy incómodas en los meses de verano, por lo que es mejor usarlas en invierno, por funcionalidad y estética.
"En definitiva, ahora que llegamos al ecuador del invierno y la primavera está más cerca, es un buen momento para decidirse por una intervención de cirugía plástica si es ésta nuestra intención, ya que el frío contribuye a que la recuperación sea más rápida y sencilla", concluye el doctor Vila Moriente.