De los más de 90 millones de estadounidenses con obesidad, tan solo unos pocos reciben tratamiento a largo plazo para el manejo de la obesidad, según los nuevos datos del Estudio ‘Awareness, Care and Treatment In Obesity Management' (ACTION, por su siglas en inglés) publicado en la revista Obesity. Entre los hallazgos se destaca que, aproximadamente el 71% de las personas con obesidad asegura haber conversado con su médico (HCP) sobre su peso en los últimos 5 años y solo el 55% declara haber sido diagnosticado de obesidad. Los datos de ACTION se presentaron en el marco de la Semana de la Obesidad, que tuvo lugar en Washington.
El estudio se diseñó para identificar las principales barreras a la atención desde el punto de vista de las personas con obesidad, de los profesionales sanitarios y empleadores. Según el Comité Directivo que ha liderado la iniciativa, los resultados del Estudio ACTION inducen a la colaboración para mejorar la educación, así como el cuidado y apoyo a las personas con obesidad.
En este contexto, el Dr. Lee Kaplan, director del Instituto de Obesidad, Metabolismo y Nutrición del Massachusetts General Hospital Weight Center, miembro del comité de dirección de ACTION y autor principal del estudio, plantea que "aquellos que estamos en la comunidad médica debemos preguntarnos por qué esta enfermedad epidémica, como lo es la obesidad, no se diagnostica y trata con la misma urgencia y atención que cualquier otra enfermedad grave". En opinión del especialista, los profesionales tienen que "repensar la obesidad para que el público y la comunidad de profesionales sanitarios entiendan más sobre la biología, la cronicidad y el impacto en general que tiene la enfermedad en la salud. Se puede lograr un progreso real si superamos las mentalidades arraigadas asociadas a las barreras presentadas en el estudio ACTION".
El estudio ACTION, en el que participaron más de 3.500 personas, revela cinco barreras clave que obstaculizan la atención integral
- Personas con obesidad partícipes en varios intentos por perder peso, en la que solo unos pocos fueron capaces de mantener la pérdida de peso alcanzada;
- A pesar del reconocimiento de la obesidad como una enfermedad, la mayoría de las personas con obesidad consideran que la pérdida de peso es responsabilidad suya, lo que puede impedirles a buscar la ayuda de su médico (HCP).
- Muchas personas con obesidad no han recibido un diagnóstico oficial.
- El diálogo paciente-profesional sanitario sobre el control del peso es insuficiente con pocas visitas de seguimiento.
- Y los programas de bienestar del empleador no satisfacen las necesidades de las personas con obesidad.
"Las barreras identificadas en el estudio destacan las oportunidades de cubrir los vacíos de conocimiento para facilitar la verdadera colaboración entre los diferentes agentes involucrados", explica la coautora del estudio y miembro del comité directivo de ACTION, Ángela Golden, DNP, FNP-C, FAANP. "Solo entonces- añade- el cuidado de la obesidad se convertirá en parte integral de la práctica estándar, ya sea en un entorno de atención médica o laboral, y la persona con obesidad puede contar con el apoyo que necesita para lograr sus objetivos de pérdida de peso como parte del tratamiento general de su enfermedad".
Acerca de la obesidad
La obesidad es una enfermedad crónica que requiere de un tratamiento a largo plazo. De naturaleza compleja y multifactorial, la obesidad está influenciada y condicionada por factores genéticos, fisiológicos, ambientales y psicológicos.
El incremento de la prevalencia de la obesidad a nivel global constituye un problema de salud pública que tiene serias implicaciones económicas para los sistemas de salud. En Estados Unidos, aproximadamente el 38% de los adultos, o 92 millones de adultos, viven con obesidad. A pesar de la alta prevalencia de la obesidad, muchas personas con obesidad carecen de apoyo en sus esfuerzos por perder peso, mientras la enfermedad sigue sin ser diagnosticada.