Por primera vez en España se ha implantado a dos pacientes con obesidad mórbida un novedoso dispositivo, similar a un marcapasos, que les permitirá adelgazar entre el 21 y el 35% del sobrepeso en los primeros 12 meses. España, junto a Alemania y Reino Unido, ha sido elegida para el desarrollo de este nuevo sistema de adelgazamiento.
El dispositivo implantado se instala mediante cirugía mínimamente invasiva en la pared exterior del estómago. A través de una cánula que alcanza el interior es capaz de detectar el momento en que el paciente ingiere algún tipo de alimento, sea sólido o líquido. Entonces se pone en funcionamiento y envía impulsos eléctricos de bajo nivel a la pared del estómago provocando su distensión y, como consecuencia, una sensación de saciedad antes de que se llene. El médico, sin necesidad de una nueva intervención quirúrgica, puede calibrar la intensidad de la neuroestimulación del estómago, ajustándola a la evolución del paciente mientras dura el proceso de adelgazamiento.
Además, este dispositivo registra automáticamente en su memoria si el paciente come, bebe o hace ejercicio. Por medio de una simple conexión inalámbrica, el médico y el paciente pueden ver los datos de consumo de alimentos y ejercicio, lo que les permite comprender a ambos los comportamientos del paciente y desarrollar estrategias eficaces para optimizar la pérdida peso.
Este sistema no altera la fisiología del estómago y es apreciablemente más seguro que la técnica de banda gástrica ya que no tiene tantas complicaciones en el posoperatorio, reduce la morbilidad y el número de intervenciones al cabo de uno o dos años, no exige el seguimiento de dietas complejas y facilita la reeducación del paciente en relación a los hábitos alimenticios.