Recurrir a un profesional de Atención Primaria ayuda a dejar de fumar

Muchas veces la gente se plantea dejar de fumar cuando ya tiene un problema de salud grave. Pero los estudios han mostrado que el máximo beneficio en cantidad y calidad de vida se obtiene cuando antes se deje de fumar, a ser posible cuando no haya aparecido ninguna enfermedad. La Atención Primaria puede jugar un papel clave en estas etapas.

En este sentido, el estudio ISTAPS en el que han participado 2.827 fumadores de 82 centros de Atención Primaria de toda España reafirma el papel clave de los profesionales para ayudar a dejar de fumar. De hecho, el 75% de las personas incluidas en el estudio no se planteaban en un futuro cercano dejar el tabaco y la intervención del médico de familia y la enfermera en estos casos ha ayudado por igual tanto a los que querían dejarlo enseguida como a los que no se lo planteaban.

Además, el estudio indica que la intervención del médico de familia y de la enfermera siguiendo el protocolo del estudio aumenta en un 50% las probabilidades de dejar de fumar con éxito y a largo plazo. Sin embargo, dejar de fumar es difícil y requiere tiempo, y solo un 8% lo consigue de forma estable (más de un año) al final del seguimiento.

El estudio se basa en diferenciar las personas que quieren dejar de fumar en un futuro próximo y los que no, y aplicar intervenciones diferentes en cada caso. La persona que no se lo ha planteado debe reconsiderar el papel que juega el tabaco en su vida, las ventajas y los inconvenientes que tiene para ella dejar el tabaco y tiene que encontrar sus propios motivos.

La persona que ya quiere dejar de fumar necesita estrategias concretas y en algunos casos un fármaco. A pesar de que la intervención varía, los resultados finales son similares en ambos casos (si se tiene en cuenta otros factores como la dependencia a la nicotina, la edad o tener una pareja que fuma).

El ISTAPS forma parte de una serie de estudios llevados a cabo por la Red de Actividades Preventivas y de Promoción de la Salud con la financiación del Fondo de Investigaciones Sanitarias y el Instituto de Salud Carlos III y coordinado desde el IDIAP Jordi Gol.

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