Según el Informe Anual sobre el Alzheimer 2011 realizado por Alzheimer's Disease International (ADI) "en los países con altos ingresos, apenas el 20% de los casos de demencia son reconocidos y documentados en la Atención Primaria; en los países de bajos a medianos ingresos, este porcentaje puede ser tan bajo como un 10%". En este informe se incide también en la alta tasa de infradiagnóstico, hasta un 75%, de esta enfermedad.
Actualmente, no existe en España un centro que permita en poco tiempo saber si una persona padece algún tipo de demencia, sobre todo en los casos en que la enfermedad se encuentra en una primera fase, por ello realizar un diagnóstico precoz de las demencias es una de las principales claves para conseguir ralentizar la enfermedad y poner en marcha el tratamiento adecuado.
Con esta Unidad que Sanitas Residencial pone en marcha se cubren tres aspectos básicos: métodos diagnósticos innovadores, consulta con un médico geriatra especializado quien realizará una valoración cognitiva, afectiva, funcional y clínica, y acceso a un primer estadio de tratamientos especializados como estimulación cognitiva, musicoterapia, reminiscencia o sesiones de intervención familiar.
Las demencias son un conjunto de enfermedades con síntomas muy diferentes. El médico-especialista de la Unidad, Pedro Gil, asegura que "entre los primeros signos de alarma se incluyen, no solo la pérdida de memoria sino también otros como los cambios conductuales y emocionales, la pérdida de vocabulario o la incapacidad para realizar movimientos finos".
Uno de los principales problemas a la hora de diagnosticar la demencia es que está muy extendida la idea de que el envejecimiento conlleva la pérdida de capacidades cognitivas hasta el punto de interferir en sus actividades diarias y, por ello, aún hay un número considerable de personas por diagnosticar.