Que el tabaco provoca efectos negativos en la salud no es ninguna novedad, ni tampoco que tanto la Administración como los profesionales sanitarios recomiendan e implantan medidas para difundir sus riesgos sanitarios y provocar así el abandono de su consumo, como el empaquetado neutro, ya implantado en algunos países europeos y cuyo objetivo es disminuir el atractivo de este producto.
Sin embargo, muchas de estas medidas no surten efecto en la población, que sigue consumiendo este nocivo producto. Por este motivo y coincidiendo con el quinto aniversario de la entrada en vigor de la Ley Antitabaco de 2011 y con el Día Mundial Sin Tabaco que se celebra el próximo 31 de mayo, IMOP y Berbés Asociados han querido conocer los hábitos tabáquicos de la población española a través de una nueva pregunta IMOP-Berbés.
¿Cuál ha sido el efecto de esta ley entre la población fumadora? ¿Ha tenido realmente repercusión en los hábitos en los fumadores españoles? Según los resultados obtenidos en la encuesta, un 26% de los fumadores de hace cinco años ha dejado de fumar en este tiempo, destacando entre ellos la población de más de 65 años y la comprendida entre los 25 y 34 años.
La Comunidad Valenciana y Galicia son las comunidades donde más se ha notado este abandono del consumo de tabaco por parte de la población, siendo Madrid y Cataluña en las que menos personas han dejado de fumar.
Además, un 47% de la población fumadora considera que sus hábitos tabáquicos no se han modificado y que siguen fumando lo mismo, lo cual muestra que, a pesar de la implantación de la ley, siguieron con su rutina en el consumo de tabaco. Mientras, alrededor de un 23% de los fumadores de entonces sí que ha reducido el número de cigarros consumidos en este tiempo, siendo mucho más los hombres (27%) que las mujeres (19%) los que han limitado su consumo, lo cual es un dato positivo.
Por su parte, de la encuesta se desprenden también datos menos usuales, como que un 1% de los fumadores de entonces han aumentado el número de cigarros consumidos en este tiempo, o que un 1% de la población general ha comenzado a fumar en estos cinco años.
Por último, aunque el 66% de la población española sigue sin fumar, según datos de la OMS a nivel mundial, 600.000 muertes ocurren entre personas no fumadoras expuestas al humo del tabaco.