Uno de cada 88 niños que nace tendrá el denominado Trastorno del Espectro Autista (TEA), que es un trastorno del neurodesarrollo que produce alteraciones en la comunicación, interacción social y patrones de conducta repetitivos, restrictivos y/o estereotipados de comportamiento en determinadas intereses o acciones.
Esta realidad será expuesta por la psicóloga Ana Carazo, especializada en Trastornos del Espectro del Autismo y otras alteraciones del desarrollo, en el curso "Comprender a las personas con Trastornos del Espectro del Autismo". Dicha formación ha sido organizada por el Colegio Oficial de Psicología de Bizkaia para los días 11 y 12 de mayo (viernes y sábado) en Bilbao.
El objetivo del curso es formar a profesionales de la Psicología para alcanzar una mayor comprensión y conocimiento sobre los "Trastornos Espectro Autista" y sobre las personas con Trastornos del Espectro Autista. Se trata de de capacitarles para identificar los signos o señales de alerta para detectar un posible Trastorno del Espectro del Autismo, orientar la intervención más adecuada según los conocimientos e investigaciones actuales y reconocer la diversidad de perfiles incluidos en los TEA.
En este contexto, Ana Carazo ha explicado que "hoy en día sabemos que una intervención temprana cambia el curso de desarrollo y por eso es vital que seamos capaces de realizar un diagnóstico rápido". "Es un trastorno que se manifiesta durante los tres primeros años de vida y que perdurará a lo largo de todo el ciclo vital", ha subrayado.
Por ello, aconseja a los padres y madres que "ante una sospecha firme, debemos buscar a un/a profesional especialista que pueda aplicar las herramientas de diagnóstico actualmente reconocidas para identificar los TEA y paralelamente, debe iniciarse la atención temprana".
Los síntomas más comunes son falta de respuesta al nombre, ausencia de sonrisa social, bajo contacto ocular, tiende a jugar solo/a etc. "El diagnóstico no se hace a ojo, sino que hay una serie de herramientas de diagnóstico reconocidas que clarifican el diagnóstico de este trastorno", y ayudan a describir el perfil de concreto en cada caso. Porque "aunque hablamos de Trastornos del Espectro del Autismo, y hay un abordaje general, la diversidad que abarca el término es enorme y cada persona con TEA es única", concluye.