Hongos Respuesta inmune Cultivo bacteriológico Bacterias Hiperemia Inflamación Alérgeno Polen Retina Proteínas Enrojecimiento Ácaros Virus Seres vivos unicelulares o pluricelulares que forman un cuerpo filamentoso muy ramificado.
Es la forma en que el cuerpo reconoce y se defiende así mismo contra las bacterias, virus y sustancias que parecen extrañas y dañinas para el organismo.
Siembra de un agente patógeno en un medio idóneo para su crecimiento y así confirmar su identidad y presencia.
Microorganismos que se reproducen por división celular. Pueden tener forma de esfera, de bastón o de espiral, y se pueden encontrar en prácticamente cualquier entorno. Determinados tipos de bacterias pueden causar enfermedades graves a los humanos y otras, en cambio, son beneficiosas.
Aumento del flujo sanguíneo a un órgano o tejido.
Respuesta de los tejidos corporales a una agresión o herida, caracterizada por calor, dolor, rubor y tumefacción. Su gravedad, sus características especiales y su duración dependen de la causa, de la zona afectada y del estado de salud del individuo.
Es una sustancia que desencadena una alergia.
Secreción de los órganos masculinos de las plantas para fecundar los órganos femeninos de las mismas.
Capa posterior del ojo sensible a la luz donde se forman las imágenes, que comunica al nervio óptico para su transmisión al cerebro, que interpreta la imágenes y produce la visión.
Son sustancias constitutivas de las células y de las materias vegetales y animales.
Es la coloración rojiza de la piel por una dilatación transitoria de los vasos sanguíneos.
Son unos artrópodos que se pueden encontrar en diferentes ambientes, entre ello el polvo doméstico.
Agente infeccioso (microorganismo) constituido por ADN o ARN (ácidos nucleicos) y con capacidad para reproducirse en una célula viva.