Aumentan las consultas de otorrinolaringología provocadas por los problemas vocales que supone el sobreesfuerzo al hablar con mascarilla

Los especialistas han detectado un aumento de síntomas típicos de una faringitis crónica durante la pandemia motivado por el sobreesfuerzo al hablar o por la no ejercitación vocal

Expertos del Hospital Vithas Xanit Internacional alertan del aumento de consultas de otorrinolaringología provocadas por los problemas vocales que supone el sobreesfuerzo al hablar con el uso de la mascarilla. A esto se le añade la escasa ejercitación vocal que han sufrido algunos pacientes durante la pandemia.

"El uso de la mascarilla hace que forcemos la voz y nos cueste más trabajo entendernos, ya que no podemos apreciar la mímica facial y la lectura labial. Además, no articulamos igual las palabras y nos trabamos tratando de hablar manteniendo la mascarilla en la posición correcta o porque a modo de barrera algo de sonido se atenúa", explica el Dr. Robin Reyes, jefe del servicio de otorrinolaringología del centro clínico.

Este esfuerzo mayor se traduce en un aumento de la fatiga vocal. "Doctor estoy más afónico últimamente, se me seca la garganta y me cuesta trabajo al hablar, me canso y noto una presión en la garganta, etc." son algunas de las cuestiones que refieren los pacientes en consulta, añade el Dr. Reyes. Se trata de síntomas típicos de una faringitis crónica que en tiempos de pandemia están aumentando. 

"Todos estos síntomas los encontramos a diario en muchos pacientes que no tienen ninguna limitación física o patología previa vocal, simplemente porque su profesión les exige un sobreesfuerzo vocal como ocurre en profesores, educadores, monitores, locutores de radio, personal que trabaja de al público…", explica el especialista, quien añade que "estamos viendo estos síntomas incluso en pacientes que no trabajan, jubilados o personas que en su trabajo no precisa forzar la voz pero que por su carácter y por su forma de vida utilizan más de lo recomendable su voz".

En el lado contrario, y no por ello menos importante, están los pacientes que en tiempos de confinamiento, aislamiento y menor contacto social utilizan muy poco su voz. "El músculo vocal, como todo músculo, requiere de entrenamiento. Si no se utiliza y se pierde el tono muscular la voz también se ve tremendamente afectada", añade el doctor.

A los problemas vocales que supone el sobreesfuerzo al hablar o la no ejercitación vocal en tiempos de pandemia, se suman los problemas derivados de la propia patología de vías respiratorias que produce la COVID-19 en los pacientes infectados por el SARS-CoV-2. "Rinitis, faringitis, laringitis, bronquitis y neumonías son todas patologías que pueden afectar en mayor o menor medida a las cuerdas vocales o a la sonoridad de nuestra voz".

Además, la tos, la deshidratación en los días febriles, la sequedad faríngea, el bloqueo nasal que impide respirar bien por la nariz (algo fundamental para calentar, filtrar y humedecer el aire que respiramos) junto con la necesaria e imprescindible utilización de inhaladores, aerosoles y tratamientos que en ocasiones alteran la capacidad vibrátil de nuestras cuerdas vocales, nos llevan a padecer patologías vocales.

Por otro lado, el especialista añade que "el miedo, la ansiedad, la falta de sueño, la depresión, el estrés y todo lo que afecta a nuestro estado anímico y psíquico durante estos tiempos de incertidumbre y pandemia, son factores que alteran nuestra voz".

Por ello, es importante acudir especialista ante cualquier síntoma para una correcta evaluación de la voz. El otorrino podrá explorar la vía aérea, la voz e investigar el problema vocal para un correcto diagnóstico.

Entre los consejos que nos ofrece el Dr. Reyes se encuentran además el "no forzar la voz, cuidarla y mimarla, hidratarse bien, dormir bien, no fumar y comer sano". Estas recomendaciones siempre serán buenos hábitos que nos ayudarán a mantener nuestra voz en plena forma.

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