En la actualidad, el cáncer representa una de las enfermedades más extendidas y con mayores índices de mortalidad en el mundo. En España, ya es la primera causa de fallecimiento en los varones y la segunda en las mujeres y se estima que uno de cada tres hombres y una de cada cuatro mujeres desarrollarán un cáncer a lo largo de su vida, según la Sociedad Española de Oncología Médica.
El desarrollo de tratamientos multidisciplinares que permitan la mejora de la calidad de vida del paciente oncológico es fundamental para su recuperación. Las técnicas de fisioterapia contribuyen a esta mejoría, ya que en la mayoría de los casos los tratamientos como la radioterapia o la quimioterapia dejan secuelas como los dolores músculoesqueléticos, la fatiga y la ansiedad, que pueden ser tratados por ella.
Desde el momento en el que a una persona se le diagnostica cáncer hasta que se supera la enfermedad se necesitan profesionales sanitarios capaces de abordar la enfermedad desde todos los ámbitos. Los fisioterapeutas pueden desarrollar técnicas como el drenaje linfático manual que contribuyen positivamente en la mejora de la calidad de vida del paciente oncológico.