Los abuelos viven hoy en día un envejecimiento activo, porque, además de sus responsabilidades, dedican cada vez más tiempo al cuidado de los nietos de forma cotidiana. Se trata de una tarea gratificante pero que genera muchas veces una sobrecarga de actividad que, junto a una dieta desequilibrada, podría afectar al organismo, incluyendo al sistema inmunitario. Apatía, falta de vitalidad, confusión mental y, en casos extremos, depresión, pueden llegar a ser consecuencias de un cansancio continuado.
"Debido al cuidado de los nietos, los mayores de hoy en día forman una comunidad mucho más activa que hace algunas décadas. Una alimentación equilibrada que ayude al organizmo y al sistema inmunitario es clave para garantizar un envejecimiento activo y saludable", explica el Dr. Manuel Sánchez, especialista en nutrición antienvejecimiento.
"La nutrición cumple también un importante papel preventivo; cuanto antes se empiece a tener en cuenta esta consideración en nuestros hábitos de vida, mejor se envejecerá", continúa el experto, "y es importante que esta pauta nutricional sea diseñada y supervisada por un especialista que pueda ajustarla a las características y necesidades de cada persona".
La importancia de la alimentación y el estilo de vida
Una dieta equilibrada y saludable que asegure un aporte adecuado de nutrientes, como las vitaminas, es clave para ayudar a nuestros sistemas a combatir así la sensación de cansancio. En este marco, algunos hábitos de vida saludables también ayudan a mantener la vitalidad y cuidar la salud de los mayores, como por ejemplo:- Hacer 5 comidas al día.
- Realizar actividad física moderada, como salir a caminar, nadar o hacer pequeños ejercicios aeróbicos en casa.
- Dormir una media de 8 horas.
- Mantener una buena hidratación que puede ser complementada con zumos, caldos, infusiones o lácteos líquidos, que son también fuente de vitaminas y nutrientes.