La Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP) de España denuncia la situación de olvido y vulnerabilidad en la que se encuentran los pacientes crónicos desde el inicio de la pandemia ocasionada por la COVID-19.
"La llegada de esta crisis sanitaria ha supuesto un durísimo golpe para la calidad de vida de los pacientes crónicos quienes, desde entonces, se ven en una complicada situación de desatención, incertidumbre, soledad, miedo y vulnerabilidad". Así lo ha declarado Carina Escobar, presidenta de la POP, quien ha explicado: "Con la COVID-19 se han evidenciado las debilidades de un sistema de salud que no ha sido capaz de mantener la atención sanitaria. Todo ello ha supuesto graves problemas para quienes tenían patologías previas debido a los retrasos en los diagnósticos, la cancelación de citas, la falta de información o las dificultades para continuar con los tratamientos. Los pacientes crónicos, todavía un año después, no hemos podido retomar los niveles de asistencia prepandemia".
Incapacidad asistencia sanitaria
Desde que se decretó en España el estado de alarma, el pasado 14 de marzo de 2020, la POP ha llevado a cabo, mediante diferentes informes, un seguimiento de la situación de los pacientes crónicos a fin de detectar sus necesidades y compartir con la administración nuevas propuestas de medias que tuvieran en cuenta a este colectivo.
Con estos estudios, como son el ‘Observatorio de Atención al Paciente (OAP)' o el ‘Estudio del impacto de la COVID-19 en las personas con enfermedad crónica', la plataforma ha querido poner en valor el importante coste y las dificultades derivadas de la falta de atención sanitaria a las que se han enfrentado los pacientes crónicos durante 2020 como consecuencia de la COVID-19.
Algunos de los datos que revelan estos informes indican que el 69% de los pacientes crónicos sufrió la cancelación de las consultas que tenía programadas antes de la crisis de la COVID-19, el 66,5% las ha visto aplazadas y el 41,4% de los pacientes vio suspendida o aplazada su rehabilitación durante el primer estado de alarma, con las consiguientes consecuencias en su estado de salud.
Así mismo, y como reflejo de la situación de los pacientes durante estos meses, cabe destacar que, mientras que, en los primeros meses de pandemia, un 10% de los pacientes encuestados solicitó el aplazamiento de pruebas o intervenciones por miedo al contagio, en la segunda fase, este porcentaje se incrementa hasta alcanzar el 19%.
Además, hasta un 25% de los pacientes encuestados ha declarado tener grandes dificultades para disponer de su tratamiento farmacológico tanto en la farmacia comunitaria como en el hospital.
"Estos datos son fiel reflejo de la durísima situación que están viviendo los pacientes crónicos a causa de la incapacidad del sistema nacional de salud (SNS) para mantener su atención sanitaria. Es realmente urgente que ésta se reactive a niveles de prepandemia y para ello se necesita una transformación del SNS, contando con los recursos necesarios" ha apuntado Escobar. En este sentido, la POP ha instado al Ministerio de Sanidad a reconstruir el SNS, comenzando por renovar los procesos asistenciales y dando un impulso a su digitalización.
La POP ha recordado también, que, durante este año de pandemia, las entidades de pacientes han ofrecido su atención a más de seiscientas mil familias, y ha solicitado, nuevamente, que se tenga en cuenta la participación de las organizaciones de pacientes en la evaluación, el diseño e implantación de todas las normativas, estrategias y planes de salud que les afectan tal y como establece la Proposición no de Ley (PNL) relativa a esta participación en el SNS.
Priorización en vacunación
Actualmente, y desde que comenzó la vacunación en el país, la Plataforma de Organizaciones de Pacientes ha solicitado, en repetidas ocasiones, al Ministerio de Sanidad, que se incluya a los pacientes crónicos con patologías de riesgo dentro del siguiente grupo prioritario de vacunación y en paralelo al próximo turno establecido (que corresponde, a día de hoy, a los mayores de 70 años).
En este sentido, la entidad ha pedido a la Comisión de Salud Pública que se incluya a los pacientes crónicos de alto riesgo en la actualización número 5 de la Estrategia de Vacunación COVID-19 en España, tal y como aseguró el consejero de Sanidad y Servicios Sociales de la Junta de Extremadura, José María Vergeles tras el Consejo Interterritorial de la semana pasada.
Así mismo, y ante la situación de desprotección de las personas con enfermedades crónicas frente a la COVID-19 en España, la POP ha elaborado el informe titulado ‘Análisis de la estrategia de vacunación por países: Priorización de grupos de riesgo', que recoge las estrategias de vacunación de otros países europeos como son: Alemania, Bélgica, Francia, Italia, Portugal y Reino Unido.
Este análisis comparativo evidencia una clara distinción en la priorización de los grupos de vacunación entre España y otros países europeos que sí están considerando como prioritarios a los pacientes con patologías crónicas. "No entendemos por qué en nuestro país no se está teniendo en cuenta a este colectivo y su evidente vulnerabilidad ante la COVID-19. La edad no puede ser el único factor a tener en cuenta a la hora de establecer los grupos prioritarios de vacunación, tal y como se hizo con las personas grandes dependientes, incluidas en el primer grupo de vacunación por su vulnerabilidad. Son muchos los pacientes de riesgo, de diferentes edades, que tienen que acudir diariamente a los centros sanitarios para recibir sus tratamientos y que, por tanto, se ven altamente expuestos al virus", ha declarado Escobar.