La enfermedad neumocócica, producida -entre otras- por la bacteria Streptococcus pneumoniae, supone un importante problema de salud entre la población adulta y, especialmente, entre las personas mayores con patologías de base o hábitos nocivos como el tabaquismo –hábito tabáquico-. En concreto, el tabaquismo es una de las principales condiciones asociadas a padecer Enfermedad Neumocócica Invasiva (ENI), la forma más grave de enfermedad neumocócica, que se produce cuando la bacteria invade partes del organismo habitualmente estériles, como la sangre o el líquido cefalorraquídeo, y puede manifestarse como neumonía bacteriémica, bacteriemia sin foco, sepsis o meningitis.
Mientras la tasa de mortalidad causada por la ENI en personas de entre 16 y 64 años sin patologías previas es del 5,4%, en el caso de que exista adicción al tabaco, las cifras de mortalidad, en este grupo de población, aumentan hasta el 18%. De ahí la importancia de que las personas fumadoras conozcan el riesgo que presentan de sufrir una infección neumococócica y desarrollar complicaciones, para concienciarlas de que acudan a su neumólogo y puedan vacunarse contra el neumococo, puesto que es la forma más eficaz de prevenir la enfermedad, junto al abandono del hábito tabáquico.
Según los especialistas, una de las principales razones por las que se produce este aumento de la desprotección frente al neumococo es que el tabaco altera los mecanismos de defensa pulmonares y facilita, no solo que se produzcan infecciones bacterianas respiratorias, sino que cuando estas se desarrollan su letalidad sea todavía más elevada.
31 de mayo Día Mundial sin Tabaco
Los fumadores tienen hasta cuatro veces más probabilidades de desarrollar enfermedad neumocócica frente a los no fumadores
El hábito tabáquico es uno de los principales factores de riesgo para el desarrollo de enfermedad neumocócica que, en los casos más graves, conlleva un importante problema de salud debido a sus altos índices de morbilidad y mortalidad