El Barómetro del Dolor 2020 de Voltadol, informe anual promovido por GSK Consumer Healthcare que repasa la situación de los españoles respecto al impacto que genera en sus vidas sufrir dolor físico, pone el foco en su entrega de 2020 en la mujer y revela que más del 73% de las españolas mayores de edad ha visto mermada su calidad de vida por culpa de esta dolencia. Las españolas están dos puntos por debajo de la media mundial (75%) pero superan en más de siete puntos a los varones españoles que admiten la misma circunstancia (66%).
Coincidiendo con el Día Mundial del Dolor, que se celebra el 17 de octubre, el barómetro pone de manifiesto que para un 85% de las mujeres adultas españolas, el dolor causa un impacto negativo en su día a día, frente a un 80% de hombres. Tanto es así que cuatro de cada 10 encuestadas que confirman sentir dolor físico reconocen que esta circunstancia termina por condicionar su vida diaria hasta el punto de definir lo que hacen o cómo se sienten. Un 79% de ellas desearía poder controlar mejor esta afección física.
Sin embargo, son menos las mujeres que buscan consejo médico de un profesional de la salud en comparación con los hombres, tan solo un 40% de ellas acude a un especialista (médico, farmacéutico…) frente a casi la mitad de los hombres (48%) que sí lo hace. Un 31% de las encuestadas afirma que, en ocasiones previas en las que acudió a un doctor para hablar de sus dolencias físicas, sufrió una experiencia negativa. El mismo porcentaje de mujeres admite que se siente en un entorno de mayor confianza cuando este profesional es una persona de su mismo género.
"Los datos del Barómetro del Dolor 2020 vuelven a poner de manifiesto la importancia de proveer y facilitar a la sociedad información accesible y de fácil comprensión respecto a las cuestiones que afectan a su salud", explica Helen Tomlinson, general manager de la mencionada compañia farmaceutica en España y Portugal. "Conocer las repercusiones que el dolor físico acarrea para las mujeres en su día a día resulta esencial para poder mejorar los tratamientos y las atenciones que se les puede brindar. Toda información que se le pueda hacer llegar a un consumidor sobre su propia salud es una herramienta más para empoderarle y facilitarle la toma de decisiones sobre el cuidado de la misma, un objetivo para el que la compañia está firmemente comprometido".
Acorde a este estudio, un 93% de los españoles han sufrido algún tipo de dolencia física durante el último año. Un 34% afirma sentir dolor a diario y de ellos, más de un 66% asegura que el dolor le dura, como mínimo, varias horas. Solo un 12% afirma no saber la causa de su dolor si bien 1 de cada cuatro encuestados asegura no tener un diagnóstico médico para su dolencia.
Tal y como recoge el barómetro, la generación Z (18-22 años) y los millennials (23-38) son las generaciones de españoles más propensas a sufrir determinados dolores físicos. Es otra de las conclusiones que presenta este informe, donde se indica que un 94% de los jóvenes (de 18 a 34 años) padece dolor de cabeza, un 64% dolor de oídos y un 60% dolor de cuello y hombros. Estos porcentajes se reducen sensiblemente en el resto de las franjas de edad: Los mayores de 35 años afirman en un 82% sufrir dolores de cabeza, un 41% dolor de oído y un 47% dolor de cuello y hombros.
Lidiar con el dolor y los hijos, una presión añadida para madres y padres
Otra de las principales conclusiones se centra en la labor de los padres a la hora de lidiar con el dolor físico y las atenciones y cuidados hacia sus hijos. Tres de cada 10 progenitores (32%) afirma no sentirse capaz de cuidar de sus hijos por culpa del dolor. De hecho, un 41% de ellos ataca rápidamente los síntomas del dolor desde el primer instante en que los identifica para no verse en esa situación. El porcentaje de personas sin hijos que repite esta pauta de comportamiento, atajar el dolor desde sus primeras manifestaciones, baja al 35%. Casi la mitad de los padres españoles (47%) busca consejo de algún profesional de la salud.
El hecho de tener la responsabilidad de los hijos les vuelve más estoicos. Un 81% de los padres españoles afirma "ser duro" y "sentirse capaz de soportar el dolor físico", frente a un 72% en el caso de las personas sin hijos. La mitad de las madres que sufren algún tipo de dolencia física no pueden recurrir a la ayuda de otra persona para hacerse cargo de los hijos. El porcentaje baja al 43% cuando es el hombre quien no puede asumir esta tarea y no encuentra la ayuda necesitada.
"Las ocupaciones y obligaciones que conlleva el cuidado de los hijos provoca que más de un 72% de los padres y madres reconozcan que su calidad de vida también disminuye cuando les afecta algún tipo de dolor muscular". explica María José Nuche, responsable de Voltadol en España. "Lo significativo es que todavía más de la mitad de ellos, un 53% , no consulta con un profesional".