El huevo es el alimento que de forma más frecuente causa alergia en los niños españoles, con un incidencia del 2,5 % en los primeros dos años de vida. En el 76 % de los casos aparece antes de los cinco años, en el 12 % entre los cinco y los 10 y en otro 12 % entre los 10 y los 15.
El huevo es el alimento que de forma más frecuente causa alergia en los niños españoles
Además, el 16 % tiene asociada otra alergia alimentaria y la prevalencia es mayor en aquellos que tienen sensibilización a la leche de vaca y en los que sufren dermatitis atópica, siendo también un factor de riesgo para el desarrollo de asma en los años posteriores.
La manifestación clínica de la alergia al huevo está relacionada con la edad que tiene el niño y puede variar según la forma en la que se prepara. Entre los síntomas que suelen aparecer destacan purito, urticaria, náuseas, vómitos, dolor abdominal, sibilancias y anafilaxia.
Según la información aportada por la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergia y Asma Pediátrica (SEICAP), uno de cada cinco niños con alergia al huevo mantendrá su alergia en el futuro y sus reacciones serán más severas. El número de niños que no superan la alergia ha aumentado en los últimos años.
Según los expertos, la única opción para conseguirlo es la inducción oral a la tolerancia, una terapia que consiste en la ingesta de cantidades crecientes de manera progresiva de proteínas de este alimento.
El Dr. Luis Echeverría, coordinador del Grupo de Trabajo de Alergia Alimentaria de la SEICAP, la inducción oral a la tolerancia "debe realizarse siempre por personal con experiencia en la técnica y con un entrenamiento de los padres y niños para que sean capaces de reconocer y tratar las reacciones adversas si se producen fuera del ámbito sanitario".
"Los niños que no superan la alergia, ven afectada su calidad de vida y la de los que le rodean, ya que sus proteínas están presentes en muchos productos que forman parte de la dieta y siempre habrá riesgo de que se desarrolle una reacción alérgica, de hecho es una de las causas más comunes de la anafilaxia severa", asegura el experto.
Además, el entorno del paciente debe recibir formación sobre la prevención y la gestión de las posibles reacciones adversas que se puedan producir. "Se debe maximizar la vigilancia sobre ellos y comprobar cuidadosamente el etiquetado de los alimentos procesados", aconseja el Dr. Echeverría.