Según los datos de un estudio realizado por la Sociedad Española de Cardiología (SEC), un millón de españoles de más de 40 años padecen fibrilación auricular, un tipo de arritmia muy frecuente en España. Este estudio sobre Observación de fibrilación auricular y enfermedad coronaria en España (OFRECE), promovido por la SEC, es el primer trabajo que ofrece información sobre la prevalencia de la fibrilación auricular y de la angina de pecho estable en España, así como sobre los factores de riesgo asociados a estas enfermedades.
A través de este trabajo se han analizado a 8.396 individuos sanos mayores de 40 años atendidos en las consultas de Atención Primaria de toda España. Cada persona seleccionada aleatoriamente se le ha realizado un electrocardiograma, se le han tomado las constantes, se les ha facilitado un cuestionario de Rose para analizar la prevalencia de angina de pecho estable y se han analizado los factores de riesgo cardiovascular (tabaquismo, presión arterial, índice de masa corporal, etc.).
Según los resultados de este estudio, la prevalencia ajustada de fibrilación auricular es del 4,4%. Esta prevalencia se incrementa progresivamente a partir de los 60 años, de forma que en los mayores de 80 años llega a ser del 17,7%.
Por lo que respecta a la angina de pecho estable, la prevalencia en personas mayores de 40 años es del 1,4%, algo mayor entre los hombres con el 1,5% que entre las mujeres con el 1,3%.
La Dra. Eulàlia Roig, cardióloga del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau (Barcelona) ha destacado que el estudio demuestra que "del millón de personas que sufren esta enfermedad, existe un 10% que no están diagnosticados". Los pacientes con fibrilación auricular no diagnosticada son en su mayoría varones, no diabéticos, fumadores y sin antecedentes de insuficiencia cardiaca.
Las personas que padecen fibrilación auricular también suelen sufrir algún tipo de factor de riesgo cardiovascular, los más comunes son la hipertensión arterial, el sobrepeso, la hipercolesterolemia, la obesidad y la diabetes. Además, estos pacientes también presentan una mayor prevalencia de enfermedad cerebrovascular, arteriopatía periférica, patología pulmonar, cardiopatía isquémica o antecedentes de insuficiencia cardiaca.
Según ha explicado la Dra. Roig, la relevancia de este estudio "radica en que la fibrilación auricular es causa de una gran comorbilidad y la ya existencia de nuevas terapias y un mayor conocimiento de la incidencia de esta patología pueden ayudar a una mejor distribución de los recursos sanitarios, con el fin de mejorar la atención al paciente con fibrilación auricular".