La Sociedad Española de Epidemiología (SEE) pide a las autoridades sanitarias que se refuerce la campaña de vacunación antigripal para que las personas de los grupos de riesgo que todavía no se han vacunado lo hagan. La vacunación es la manera más eficaz y eficiente de protegerse frente a la gripe. Previene casos graves y defunciones en grupos de riesgo.
Personas con enfermedades crónicas, las que tienen 65 o más años, las mujeres embarazadas y los profesionales que trabajan en el ámbito sanitario son las personas a las que se dirige, un año más, la campaña de vacunación que está ya en marcha y sobre la que la SEE quiere llamar la atención para mejorar las coberturas de vacunación de años anteriores.
Según los datos del Ministerio de Sanidad, la cobertura en 2018-19 fue 54,2% en personas de más de 64 años; 33,9% en profesionales sanitarios y 38,5% en embarazadas.
Desde la SEE se indica que "no se entiende cómo para una enfermedad prevenible por vacunación como la gripe, en un país donde es gratuita, con centros de salud accesibles a la población y profesionales sanitarios preparados, las coberturas de vacunación de gripe en profesionales sanitarios y en pacientes con enfermedades crónicas puedan ser tan bajas".
Alto impacto en la mortalidad general
El año pasado, se estima que se produjeron 35.300 hospitalizaciones con gripe confirmada. De ellos, 10.215 fueron casos graves, un 85% eran personas con enfermedades crónicas y el 61% tenía más de 64 años.
Para personas con enfermedades crónicas
La SEE recuerda que la gripe puede tener complicaciones graves para todas las personas que tienen 65 años o más y para las personas con enfermedades crónicas. Para este grupo de riesgo, el Ministerio de Sanidad, indica que deben vacunarse:
- Menores (a partir de los 6 meses) y adultos con enfermedades crónicas cardiovasculares (excluyendo hipertensión arterial aislada), neurológicas o respiratorias , incluyendo displasia bronco-pulmonar, fibrosis quística y asma.
- Menores (a partir de los 6 meses) y adultos con: diabetes mellitus, obesidad mórbida, enfermedad renal crónica y síndrome nefrótico, hemoglobinopatías y anemias, trastornos de la coagulación, hemofilia y trastornos hemorrágicos crónicos, asplenia o disfunción esplénica grave, o enfermedad hepática crónica, enfermedades neuromusculares graves, inmunosupresión, incluyendo las inmunodeficiencias primarias y la originada por la infección por VIH, por fármacos, en los receptores de trasplantes y déficit de complemento, cáncer y hemopatías malignas, implante coclear, fístula de líquido cefalorraquídeo, enfermedad celíaca, enfermedad inflamatoria crónica, trastornos y enfermedades que conllevan disfunción cognitiva: síndrome de Down, demencias y otras.
Protección a embarazadas
El Grupo de Trabajo sobre Vacunas recuerda que la vacunación de las mujeres embarazadas en el último trimestre del embarazo es la mejor herramienta de prevención. Los epidemiólogos apuntan que una mujer embarazada debe vacunarse de la gripe por las siguientes razones:
- La gripe en mujeres embarazadas y en los recién nacidos comporta una especial gravedad.
- El embarazo puede complicarse al enfermar de gripe, con riesgos para la embarazada y para el feto.
- El riesgo de hospitalización con gripe grave aumenta ocho veces durante el embarazo.
- Las vacunas antigripales inactivadas son seguras durante el embarazo, por lo que supone un claro beneficio para su salud y la de sus hijos.