El problema de la adicción al móvil e internet está experimentando un auge preocupante entre los adolescentes. Con la pandemia, este tipo de casos ha aumentado de forma exponencial, al igual que ha ocurrido con otros trastornos como la ansiedad o la depresión.
Según la Dra. Cristina Giner, psicóloga clínica del Instituto Brain 360, en este centro se están detectando casos de adicción a las nuevas tecnologías e Internet en adolescentes de edades cada vez más tempranas. "Si antes el adolescente tenía móvil a los 15 años, ahora lo tiene a los 11, con lo cual este tipo de trastornos se genera antes", señala.
La doctora también reconoce la dificultad de identificar este tipo de adicciones: "es difícil detectar cuándo el uso excesivo del móvil e internet se convierte en una patología, al fin y al cabo, todos somos usuarios. No depende solamente del número de horas que el adolescente está conectado a su dispositivo, sino del momento en que la tecnología empieza a interferir en su vida y hace que descuide sus obligaciones o muestre cambios de conducta, irritación, entre otros".
Recuperar la funcionalidad del cerebro
Las nuevas tecnologías, capaces de lo mejor y de lo peor dependiendo del uso que se hace de ellas, están aportando ahora un abordaje innovador de este tipo de trastornos gracias a la estimulación cerebral no invasiva.
"La estimulación cerebral no invasiva es una técnica que permite modular la excitabilidad cerebral y hace que determinadas regiones del cerebro que presentan un funcionamiento anómalo puedan normalizar su actividad. Con ello se obtiene una mejora de la sintomatología que, además, se mantiene en el tiempo", asegura el Dr. Diego Redolar, responsable de la Unidad de Neuroimagen y Neuromodulación del mencionado centro, y profesor de Neuropsicología y codirector del grupo de investigación CNIT de la UOC.
Educar para un buen uso responsable de las TIC
Dada la magnitud del problema que representa hoy el abuso de las TIC en adolescentes, el centro ha puesto en marcha un programa para ayudar a las escuelas a abordar este y otros trastornos de la salud mental. Con él se pretende fomentar un uso responsable de las TIC, identificar a jóvenes con problemas de adicción a estas nuevas tecnologías y tratarlos mediante estrategias terapéuticas personalizadas.
El programa, que incluye charlas informativas en colegios y soporte a los equipos de psicopedagogos, no se limita solamente a las adicciones a las TIC, sino que abarca también el tratamiento de otras patologías como el autismo, el síndrome de Asperger, la depresión, o los trastornos de Déficit de Atención.
La encuesta realizada por el Plan Nacional sobre Drogas de España en población escolar (14-18 años) ESTUDES 2016-2017 destaca la presencia de un uso compulsivo de Internet con puntuación superior a 28 en la Compulsive Internet Use Scale (CIUS), en el 21% de la población escolar encuestada. Ese resultado supone un 4,6% más que la encuesta de 2014.
"Las nuevas tecnologías tienen su parte buena y mala. Por un lado, permiten el acceso a información inmediata, ocio, aprendizaje o relaciones sociales. Por otro, favorecen la aparición de dependencias a las redes o los videojuegos. El adolescente es la población más vulnerable y hay que estar alerta. Por eso, es importante que familias y docentes cuenten con pautas que les permitan reconocer este tipo de trastornos y actuar ante ellos", afirma la Dra. Giner.