Su médico realizará el diagnóstico en función de una serie de síntomas y signos. Entre los más precoces y comunes se encuentran:
- Disnea con la actividad física u ortopnea.
- Edemas o hinchazón en piernas, tobillos y pies.
- Palpitaciones.
- Aumento de peso repentino.
- Debilidad, mareo o confusión.
- Fatiga o cansancio.
- Tos seca al acostarse boca arriba.
- Nicturia.
- Hinchazón o dolor abdominal.
- Dificultad para concentrarse.
- Dificultad para dormir.
Además de la sintomatología y la exploración física, existen diversas pruebas complementarias que le puede realizar el especialista, como son:
- Radiografía de tórax.
- Electrocardiograma.
- Ecocardiografía, que es la mejor y más sencilla.