Es importante tomar medidas preventivas, como el adecuado manejo y almacenamiento de los alimentos. Asimismo, se ha de tener una buena higiene de manos, en especial cuando se tiene contacto directo con aves de corral y sus huevos.
En caso de poseer un reptil, se recomienda la utilización de guantes al manipularlo o manipular sus excrementos, ya que Salmonella se puede contagiar fácilmente desde el animal.
Otras medidas preventivas se centran en la conservación y manipulación de los alimentos.
Recomendaciones para la inocuidad de los alimentos de la Organización Mundial de la Salud:
- Lávese las manos antes de iniciar la preparación de los alimentos y con frecuencia mientras los está manipulando.
- Lávese las manos después de ir al baño.
- Lave y desinfecte las superficies y los utensilios que ha utilizado tras la preparación de los alimentos.
- Proteja los alimentos y la zona de preparación de las comidas de insectos, roedores y animales (perros, gatos…).
- Mantenga y conserve separados los alimentos crudos y los cocinados, tanto en la cocina, en la despensa y armarios como en la nevera.
- Utilice utensilios distintos para los alimentos crudos y cocinados o lávelos antes de volver a usarlos.
- Prepare los alimentos asegurándose de su cocción completa (superando los 70 grados en su zona central), en especial huevos, pollo, carnes y pescados.
- Recaliente completamente los alimentos superando de nuevo los 70 grados.
- No deje los alimentos a temperatura ambiente por más de dos horas. Métalos en la nevera inmediatamente tras su preparación si no se van a consumir inmediatamente.
- No guarde durante mucho tiempo los alimentos. Respete las garantías de conservación de los alimentos congelados que marca su congelador.
- No descongele los alimentos a temperatura ambiente. Hágalo en la nevera.
- Compre los alimentos en establecimientos autorizados, con etiquetado y comprobando las fechas de caducidad.
- Lea atentamente y mantenga los requisitos de conservación y fechas de caducidad de los alimentos.