La enfermedad por reflujo gastoresofágico (ERGE) se puede manifestar con síntomas, o sin ellos y con alteraciones endoscópicas (lesiones en la mucosa del esófago) o sin ellas. Dicho de otro modo, no tiene porque existir una correlación entre la sintomatología clínica que presenta el paciente y los hallazgos en la endoscopia (exploración del tracto digestivo) de dicho paciente.
En esta página
- ¿Cual es la historia natural del paciente con enfermedad por reflujo gastroesofágico?
- Factores epidemiológicos que parecen influir en la aparición de enfermedad por reflujo gastroesofágico
- ¿De qué métodos diagnósticos disponemos en la práctica diaria para establecer el diagnóstico de la enfermedad por reflujo gastoresofágico?
- pHmetría (PH)
Esto nos permite diferenciar una situación clínica en la cual hablaremos de enfermedad por reflujo gastroesofágico con esofagitis, es decir, ERGE erosiva, de una condición de enfermedad por reflujo gastroesofágico no erosiva, es decir, sin esofagitis. Del 30% al 70% de los pacientes que tienen síntomas típicos de enfermedad por reflujo gastroesofágico no presentan ninguna lesión en la endoscopia.
Podríamos diferenciar por un lado la ERGE con endoscopia positiva, ERGE erosiva que puede tener síntomas presentes o ausentes, erosiones endoscópicas que habrá siempre, puesto que hablamos de una ERGE erosiva y con una respuesta anormal en la pHmetría. Y por otro, la ERGE con endoscopia negativa, cuando el paciente tiene síntomas típicos pero ninguna lesión en la endoscopia (como hemos dicho se puede llegar hasta un 70% de los casos). Esta ERGE se dividirá entre dos subtipos, en función de la respuesta que tengan al ácido, si es normal o anormal, en una monitorización de 24 horas con una pHmetría.
¿Cual es la historia natural del paciente con enfermedad por reflujo gastroesofágico?
Lo primero que hay que diferenciar es entre la ERGE episódica o la ERGE crónica:
- La ERGE episódica puede producirse durante el embarazo, en situaciones que provoquen vómitos de repetición, en presencia de determinados fármacos como son los alfabloqueantes, los betabloqueantes, los antagonistas del calcio, las benzodiacepinas, es decir, medicamentos de uso muy habitual en la población que consulta en Atención Primaria.
- Frente a estos casos de una ERGE episódica, puntual, ocasional, la ERGE crónica y que en condiciones normales permanece estable en un 50%, hasta en un 45% de los casos revierte espontáneamente, sin ningún tipo de intervención y tan solo en un 5 ó 15% de los casos empeorará hacia una ERGE con esofagitis.
Factores epidemiológicos que parecen influir en la aparición de enfermedad por reflujo gastroesofágico
- Los más importantes son la edad (por encima de los 50 años) y el sexo (varón).
- Las diferencias raciales o étnicas, no parecen influir en la presentación de la enfermedad por reflujo gastoresofágico.
- Sí que existe una relación con la obesidad, es decir, a mayor índice de masa corporal, existe un gradiente de mayor clínica de reflujo gastroesofágico. Los alimentos o las comidas copiosas pueden provocar reflujo de forma puntual, pero no guarda relación con la enfermedad por reflujo gastroesofágico en el sentido de enfermedad crónica.
- El ejercicio físico intenso empeora los síntomas de ERGE, mientras que el ejercicio físico moderado previene y disminuye la clínica por ERGE.
- En cuanto al consumo de tabaco, al igual que como sucedía con la obesidad, existe un gradiente en relación con la ERGE, es decir, a mayor consumo de tabaco, a mayor número de cigarrillos consumidos, mayor es la sintomatología observada de la ERGE.
- No se ha encontrado una asociación entre el consumo de alcohol y la ERGE.
- La hernia de hiato por deslizamiento puede asociarse con síntomas de ERGE y el decúbito lateral derecho empeora los síntomas de ERGE, mientras que dormir del lado izquierdo (decúbito lateral izquierdo) parece disminuir la clínica de reflujo grastroesofágico.
- No existe ninguna correlación entre la ERGE y la infección por Helicobacter pylori, por lo tanto no está justificada ni está indicada la investigación de infección por este microorganismo, en pacientes con síntomas típicos de ERGE.
¿De qué métodos diagnósticos disponemos en la práctica diaria para establecer el diagnóstico de la enfermedad por reflujo gastoresofágico?
Sintomatología
Si el paciente presenta pirosis (ardor de estómago, acidez de estómago) y regurgitación que son los síntomas típicos de ERGE, lo que hemos llamado síndrome esofágico típico, con ello bastaría para establecer el diagnóstico de enfermedad por reflujo gastroesofágico y establecer un tratamiento empírico sin necesidad de realizar una endoscopia. La asociación de pirosis y regurgitación tiene una alta sensibilidad y una baja especificidad.
Endoscopia
Siendo una prueba muy específica, es muy poco sensible. Alrededor del 30 al 70% de pacientes que tienen síntomas típicos de ERGE no presentan ningún tipo de lesión en la endoscopia y por lo tanto, la endoscopia no es necesaria de entrada en todos los pacientes a los que se esté investigando una enfermedad por reflujo gastroesofágico.
Sí que estaría indicada cuando, por ejemplo, el paciente presenta síntomas o signos de alarma: disfagia (dolor al tragar), odinofagia (dificultad para tragar), pérdida de peso, síndrome constitucional, anemia, por ejemplo, o cuando sospechemos que el paciente no está evolucionando favorablemente al tratamiento pautado de forma empírica. La tasa anual de progresión de ERGE no erosiva, de ERGE sin esofagitis, hacia una ERGE con esofagitis o erosiva, es inferior al 30%.
pHmetría (PH)
La pHmetría, que consiste en la monitorización del PH ácido y el PH esofágico, mediante un registro continuo de 24 horas, siendo una prueba con una alta especificidad, por encima del 90%, es una prueba con una baja sensibilidad y por lo tanto, tampoco está indicada su realización rutinaria, o de entrada en todos los pacientes con enfermedad por reflujo gastroesofágico.
Tendría sentido utilizarla en aquellos casos en los cuales se esté previendo la indicación de una cirugía antirreflujo, en aquellos casos de pacientes que habiendo sido sometidos a una cirugía antirreflujo los síntomas sigan persistiendo y en aquellos casos que presentan síndromes extraesofágicos que no responden adecuadamente al tratamiento empírico.
Otras pruebas alternativas
Otras pruebas diagnósticas como por ejemplo, la radiología de contraste con enema de bario, la prueba de Bernstein, la manometría esofágica o la impedanciometría, no se justifican de entrada en el diagnóstico del paciente con enfermedad por reflujo gastroesofágico.