Aunque desde principios del siglo XX ya se había descrito y estudiado la respuesta sexual, en la década de los 60 se profundizó en el estudio de la misma
La respuesta sexual está estructurada en cinco fases, a saber: deseo, excitación, meseta, orgasmo y resolución.
La respuesta sexual humana se caracteriza por diferentes y sucesivas reacciones fisiológicas que suelen darse en todas las personas y que tienden a ser predecibles.
Aunque desde principios del siglo XX ya se había descrito y estudiado la respuesta sexual, fue en la década de 1960 cuando se profundizó en el estudio de la misma, y se dividió en cuatro fases la respuesta sexual:
- Fase de excitación: en esta fase aumenta la tensión sexual, se produce la lubricación y expansión de los dos tercios de la vagina, la vasocongestión de los labios mayores y menores junto a la erección del clítoris de la mujer, y la erección del pene y la elevación de los testículos en el hombre.
- Fase de meseta: en la mujer, si la excitación se mantiene, el tercio exterior y la entrada de la vagina adquieren una mayor hinchazón, el clítoris se retrae hasta la unión de superficies óseas del pubis aumentando la vasocongestión genital. En el hombre, el glande y el tronco del pene aumentan de tamaño, mientras que los testículos se mantienen elevados.
- Fase orgásmica: es el llamado orgasmo, el momento en que se libera toda la tensión sexual acumulada, produciéndose una serie de contracciones espasmódicas en la zona genital que luego se extienden por el resto del cuerpo. En el hombre se produce también la eyaculación.
- Fase de resolución: después de la descarga orgásmica se entra en un periodo de resolución en el que la vasocongestión acumulada va perdiéndose de forma gradual hasta llegar al estado previo de reposo.
Sin embargo, entre 1970 y 1980, otros estudios añadieron la fase de deseo, en la que se produce la atracción sexual entre dos personas por medio de diferentes tipos de estímulos. En 1991, Carrobles y Sanz añaden una última fase: la de valoración de la respuesta sexual, que tiene que ver con la satisfacción o no de la experiencia sexual.