La frontera de edad que determina que la menopausia se prematura o precoz se sitúa por debajo de los 40 años. La mayor parte de las mujeres que la sufren no llegan a tener hijos, ya que suelen ser ya estériles alrededor de los 35 años. Además, también experimentan un envejecimiento temprano.
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¿Cuál es el origen?
Hasta ahora se desconocía la causa de esta alteración, pero se sospecha que podría haber un factor genético que la condiciona.
La mujer nace con todos los óvulos de que va a disponer durante su vida fértil, es decir hasta los 50-55 años en condiciones normales. Estos óvulos permanecen prácticamente inactivos en los ovarios hasta la primera menstruación. A partir de ese momento, en cada ciclo menstrual se desarrollan entre 15 y 20 de ellos, aunque sólo uno pasa a la última etapa de maduración antes de la ovulación. Recientemente, en el Instituto del Cáncer Dana Faber (Estados Unidos) se descubrió un gen que regula y suprime la activación de los folículos del ovario llamado gen Foxo3a. Este gen sería el encargado de controlar el número de folículos que entran en las etapas de desarrollo para después ser fertilizados. Su correcto funcionamiento asegura que una mujer disponga de óvulos a lo largo del periodo normal de vida fértil.
Prevención y aplicaciones
Hasta ahora, las recomendaciones para mujeres con antecedentes familiares de menopausia prematura estaban encaminadas a conseguir una alimentación rica en calcio para evitar la osteoporosis y tratar de conseguir descendencia a edades tempranas. Sin embargo, no se podía predecir quién podría presentar una pérdida prematura de la menstruación.
Desde que se ha descubierto el gen Foxo3a es posible predecir qué mujeres son susceptibles de padecer este trastorno y por tanto disponer de tiempo para planificar su maternidad antes de que sus ovarios se queden sin óvulos.
Gracias a estos hallazgos, el equipo de investigadores sugiere que algún día se podría llegar a desarrollar una terapia anticonceptiva que retrasase la activación folicular, de manera que los folículos permanezcan en "reposo" mientras que la mujer decida mantenerse fértil. Otra posible aplicación sería encontrar algún fármaco que evitara la aparición de la menopausia prematura.
Aunque estos resultados han sido estudiados sólo en ratones (la reproducción en ratones y humanos es muy similar), hay que confirmar que son reproducibles en las mujeres.
