La mala salud puede deberse a un balance inadecuado de los nutrientes contenidos en la dieta, ya sea por exceso o por defecto.
Tipos de enfermedades
Es popular el dicho que asegura que "una persona es lo que come". Existen múltiples enfermedades relacionadas o provocadas por una deficiente nutrición, ya sea en cantidad, por exceso o defecto, o por mala calidad:
- Enfermedades cardiovasculares: la causa más frecuente de reducción de riesgo sanguíneo es la aterosclerosis, que consiste en un depósito de lípidos, sobre todo colesterol, en la pared arterial, una infiltración de leucocitos y una hipertrofia o hiperplasia de las fibras musculares lisas de la pared vascular.
- Diabetes tipo 2: en los países en vías de desarrollo se está observando un incremento notable de la prevalencia de diabetes mellitus tipo 2 (no insulinodependiente), coincidiendo con los nuevos estilos de vida y hábitos alimentarios.
- Obesidad: la obesidad, al margen de factores genéticos, se produce como consecuencia de una ingesta excesiva de calorías y de la inactividad física. La sociedad actual tiene una tendencia al sedentarismo y a la dieta hipercalórica, por lo que la obesidad ha sido ya calificada como la epidemia del siglo XXI.
- Trastornos del comportamiento alimentario: en la sociedad actual se da una gran contradicción entre la cantidad de alimentos disponibles y el canon estético que obliga a mantenerse delgado. Es por esto que el individuo se ve sometido a gran tensión y, en algunos casos, puede llegar a desarrollar trastornos del comportamiento alimentario, como son la anorexia y la bulimia.
- Enfermedad oral (caries): la fermentación bacteriana de los azúcares presentes en los alimentos genera diversos ácidos que producen la desmineralización progresiva del esmalte dentario. El consumo frecuente de azúcares, junto a una higiene bucal inadecuada, está estrechamente ligado con las caries y las enfermedades periodontales.